Quisiera morir entre tus brazos putrefactos: la devastación exquisita de Julia Gfrörer

El fin del mundo se cierne cíclicamente sobre nuestras cabezas. Ya sea como ancestral castigo divino o como la promesa de la inminente rebelión de las máquinas, las imágenes y las palabras alrededor de la manera en la que nuestra historia colectiva llegará a su fin siempre nos han inquietado, y en las delicadas líneas de tinta de Julia Gfrörer reconocemos una encarnación más de esta preocupación.

En Laid Waste esta autora estadounidense nos presenta un contexto sin especificar, pero del que identificamos elementos históricos que nos suenan a leyenda: unas pulgas abren paso a delirios religiosos y unas ratas nos terminan de situar en un espacio íntimo de aquel siglo XIV en el que la peste negra sembró pueblos de cadáveres que tenían que ser cargados por sus familiares hacia fosas improvisadas en las que se acumulaban capas y capas de cuerpos. 

En las páginas de este cómic, editado originalmente en 2016 por Fantagraphics, y de reciente aparición en español dentro de la flamante colección Alpha Cómics de la editorial española Alpha Decay con el título de Devastación, seguimos la historia de Agnés en su pequeña aldea y en los finos trazos dibujados de Gfrörer reconocemos la convivencia cotidiana con la muerte, la búsqueda imposible de una explicación ante un fenómeno que sobrepasa a una población de tal manera, el asidero desesperado a las pulsiones de vida de quienes sobreviven, la animalidad inevitable de los cuerpos

Julia Gfrörer forma parte de un pequeño grupo de artistas independientes de cómic que explícitamente abogan por la necesidad de introducir temas más complejos, narrativas menos digeribles, historias, personajes y motivos que incomoden a quien lea sus historietas; ello la ha llevado a hacer experimentos como escribir los textos de sus guiones en latín, o a explorar temas que tienen que ver con el ocultismo en contextos antiguos. Una darks por todo lo alto.

Como lo ha hecho en otros trabajos, Julia Gfrörer se detiene en el vínculo innegable que existe entre la muerte y el deseo, y en esta especie compleja de amor que se genera como una pausa mínima en la tormenta de la desesperanza y los momentos límite. Y si ya en Black is the Color sus páginas presentaban pocas variaciones en la composición de sus retículas, en Laid Waste Gfrörer se restringe a usar únicamente cuatro viñetas de igual tamaño por página a lo largo de toda la historia. Estas decisiones formales sólo resaltan más un dibujo sumamente preciso en el que se desenvuelve una historia de horrorosa humanidad, que ahora nos resulta profundamente cercana.

Una de las cosas que sin duda provoca el trabajo de Julia Gfrörer es recordarnos de qué estamos hechos: de carne que se pudre, de vísceras, de fluidos, de huesos que se comerán los perros en la tierra o los peces si nos echan al mar. Y que, humanamente, a lo que podemos aspirar es a crear algún tipo de vínculo, por poco que dure ese abrazo, por cerca que esté de acabarse el mundo. 

(Texto publicado previamente en el periódico virtual Vacaciones de trabajo, verano de 2020)

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s